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Un hombre abusó de su hijastra, la mantuvo encerrada durante 22 años y tuvo tres hijos con ella: lo detuvieron
La víctima, de 29 años, denunció que sufrió abusos, violencia y control absoluto desde los siete años. El agresor fue detenido y enfrenta cargos gravísimos.
Una joven de 29 años logró escapar tras pasar 22 años en cautiverio, sometida por su padrastro a un infierno de abusos, amenazas y control psicológico en la localidad brasileña de Araucária, en la región metropolitana de Curitiba
La pesadilla comenzó cuando la víctima tenía apenas siete años. Según su relato ante la policía, el hombre —hoy de 51 años— la mantuvo bajo su dominio desde la infancia, utilizando la violencia y el miedo para impedir que buscara ayuda. “Yo sabía que él era una persona agresiva. Tenía miedo, mucho miedo, todavía tengo. Me amenazaba, decía que si no era de él, no sería de nadie. Que nuestra separación solo sería con la muerte”, contó la joven, visiblemente conmocionada, en diálogo con g1.
El escape y la denuncia: un plan desesperado para salvarse
El martes 16, la joven encontró una oportunidad para huir. Le dijo al hombre que necesitaba llevar a sus hijos a un centro de salud, pero en realidad se dirigió a una comisaría. Allí, rompió el silencio y denunció todo lo que había vivido.
El hombre fue detenido y durante el interrogatorio, el sospechoso negó los hechos.
A lo largo de más de dos décadas de encierro, la joven tuvo tres hijos con el agresor. “Pensé que un día iban a estar contando mi muerte, porque jamás pensé que podría escapar. Él decía que si no lo hacía él, lo harían otros. No veía salida. No aguantaba más”, relató entre lágrimas.
Tras la denuncia, la víctima y sus hijos fueron trasladados a un lugar seguro, mientras la Justicia analiza medidas de protección urgentes. “Espero poder ser libre, algo que desde chica soñaba. Veía a otras chicas y pensaba: ‘¿Por qué yo no puedo ser igual?’ Me sentía vigilada todo el tiempo, aunque no hiciera nada malo. Solo mentí esa vez para poder ir a la comisaría. Ahora solo quiero que él no me haga más daño. No quiero pasar por esto nunca más”, expresó.
Abusos desde la infancia y control total
La investigación reveló que los abusos comenzaron cuando la víctima tenía siete años, mientras su madre aún estaba casada con el agresor. Según el comisario Eduardo Kruger, el hombre la obligó a mantener una relación con él tras separarse de su madre.
“A los 15 años, la víctima quedó embarazada. El hombre se separó de la madre y la obligó a quedarse con él”, detalló el funcionario.
El horror no terminó ahí: el agresor también la forzaba a mantener relaciones con otros hombres y grababa los abusos en video.
“Vivía en una prisión. Algunos días eran buenos, otros horribles. Mucho sufrimiento. Nadie sabe cuánto lloré sola. Nadie sabía nada. Él no se preocupaba. Al día siguiente decía que todo iba a estar bien, pero después volvía a hacer lo mismo”, relató la joven.
Cámaras, amenazas y violencia psicológica
El control era absoluto. La policía confirmó que el hombre instaló cámaras de vigilancia en la casa para monitorear cada movimiento de la víctima. “Salía de casa muy pocas veces y él controlaba minuto a minuto lo que hacía”, explicó el comisario.
Tras la denuncia, los agentes allanaron la vivienda, detuvieron al sospechoso y secuestraron las cámaras y videos de los abusos almacenados en su celular. En los audios recuperados, el hombre amenazaba: “Volvé a casa, si no vas a tener problemas serios conmigo. ¿Qué está pasando? Hablá conmigo o voy a ir a buscarte”.
Siete cargos gravísimos y una investigación en curso
El detenido enfrenta una larga lista de delitos: abuso de vulnerables, violación, privación de la libertad, amenazas, persecución, violencia psicológica y daño emocional.
La madre de la víctima fue citada a declarar, aunque la policía no informó si también está siendo investigada.